sábado, 31 de diciembre de 2011

¡Feliz año nuevo!

Otro año más, queridos amigos, otro año más. Aunque siempre intento persuadirme de que este día no es más que un número en el calendario, un día como otro cualquiera, al final por unas o por otras algo se me pega del entusiasmo que predomina en tan señaladas fechas. Quizá sea el cóktel de alcohol, drogas y polvorones que se ha ido acumulando en mi cuerpo desde el 24 de diciembre lo que me hace contagiarme del espíritu navideño, o quizá sea el sentimiento de empatía colectiva, o quizá las lucecitas que cuelgan por las calles, yo qué sé lo que será... El caso es que aquí ando tecleando en mi ordenador a falta de una inspiración más original y diciendo lo que dicen todos: que le den por culo a 2011.

Os deseo a todos los que leáis esto y a los que no lo leáis, a todos los amigos, a los enemigos, a los artistas, a los que al menos lo intentan, a los que la tienen tan gorda que no encuentran dónde meterla, a los que tienden la mano, a los que apuñalan por la espalda, a los honestos, a los hipócritas, a los vagabundos, a los políticos, a los banqueros, a las prostitutas, a las amas de casa, a los padres de familia y a los crápulas de botella en mano, a toda la gente, en fin, una feliz nochevieja y próspero año nuevo.

Sed buenos.

Y si sois malos: invitad!!